He estado
pensando todo este tiempo qué es lo que más o menos hacemos a lo largo de
nuestra vida. Empezamos bien temprano nuestra educación para ser gente de
bien... Continuamos una parte muy importante de nuestra infancia en esos
menesteres... y al final, conseguimos un preciado título, Aquel papelito que
nos pondrá “en el lugar que
merecemos”.
Poco después, empezamos a engrosar las temidas
listas del desempleo. Hasta que definitivamente un día encontramos
un “buen trabajo”...tras duras pruebas que soportamos a lo largo de la faceta
de iniciación.
Empezamos una bonita carrera
profesional recargada de actividad y trabajo,...mucho, mucho trabajo,...hasta
que caemos exhaustos. ¡Ahhh...! Pero somos grandes profesionales y con gran éxito en el mercado. El tiempo empieza a pasar y buscamos nuevos
objetivos. Encontramos el amor de nuestra vida y prometemos amor eterno. Y
prometemos amor eterno. Llega el sabido Embarazo. Dios nos bendice con hijos.
¡Ahh, otra noche que no pego el ojo! Seguimos escalando puestos en la vida
intentando ganarle tiempo al tiempo. Somos la estrella donde vamos y poseemos
el cuerno de la abundancia. Pero… necesitamos aún más horas...para ser un verdadero
triunfador. Pero un día te dicen ¡que prescinden de ti! En ese momento te crees
volver loco,
Te sientes
abatido, decepcionado y devaluado Y te das cuenta que has perdido la
comunicación. Te das cuenta que has estado cerrado a todo. Ahora intentas
sujetar el tiempo para que no pase, pero se te va de las manos.
Te das cuenta que has vivido en una
cortina de humo Siguiendo una tonta zanahoria. Te conviertes en un fantasma que
deambula Intentando sortear los golpes que te empieza a dar la vida. Sólo te
queda ver pasar el tiempo a tu
alrededor Hasta que te llegue la hora
Después
de este análisis me ha venido una idea a la cabeza para llevarla a la práctica
en mi vida.
Voy a tomármelas cosas más en broma.
Voy a intentar abrir mi corazón al amor. Escucharé más a la gente de mi
alrededor.
Por supuesto
viajaré. No sé si en Karaoke, pero creo que cantaré más. Iré al mar con más
frecuencia. Fomentaré mi faceta de anfitrión. Me juntaré al calor de los buenos
amigos. Quizá un poquito de más amor. Me alegraré mucho más de las noticias de
los amigos. Buscaré metas conjuntas No sé, creo que no me hará daño algo de
deporte. “Bueno, puede que parezca vicioso pero soy muy cariñoso”.
Y sobre todas las cosas, buscaré a
Dios de todo corazón. No sé si valdrá la pena o no, lo único que sé, es que las
personas que amo se la habrán pasado bien en mi compañía y que al final del
camino sabré que disfruté y que tal vez dejé alguna huella en algún corazón,
que es al fin y al cabo lo que cuenta.
¿No te parece?
No hay comentarios:
Publicar un comentario